domingo, 21 de agosto de 2011

AUTORIDAD EN EL MUNDO

¡Cada ser humano es la autoridad en su propio mundo! Ni el hombre ni la mujer son ya más enseres de los demás, sino que la Corriente de Vida de cada quien dice: "Tenemos que actuar AHORA!
¡Tenemos que hacer el LLamado AHORA! ¡Ahora tenemos que hacer que se nos descargue la Pureza y la Perfección de Vida en esa corriente de Vida, y en su Foco en la octava humana, para que esto sea despejado por siempre de la Corriente de Vida de cada quien!
¡La vida está actuando ahora, Mi gente querida! Esto no es cuestión de la opinión humana de nadie, sino la Ley de su propia Vida!
y si los amados en América tan sólo escucharan cuidadosamente a estos amados Mensajeros al tiempo que ellos les proclaman esta Ley con tanto Amor, ustedes serían seres de Liberación Absoluta; pero si dudan o cuestionan su Autoridad, Su Veracidad, su Comprensión, entonces habrán cerrado la puerta a las Bendiciones que ellos tan bondadosamente ofrecen. ¿Recordarán esto?
No son estos Mensajeros, ellos no están haciendo más que transmitir las Leyes de Vida que su Gran Benefactor ha puesto de manifiesto. Ellos han ayudado en pequeña medida, pero fue Saint Germain quien tomó la iniciativa y Nosotros seguimos.
Recuerden que sólo dos creyeron con Él bajo las condiciones de la humanidad siete años atras; que era posible para cualquiera ser criado en América lo suficientemente fuerte como para sostener esta Luz hasta que la humanidad pudiera comprender; pero ha sido maravilloso y tremendo allende toda expectativa, aún la imaginación hasta de Nosotros, ya que nadie, ni siquiera los Seres Ascendidos y Perfeccionados, pueden decir que lo que la energía de la humanidad va a hacer, hasta que lo hace.
Estos grandes LLamados, estos poderosos Decretos que ustedes hacen, están prestando un servicio a la Tierra que no tiene paralelo.
Que ustedes sientan eso, y que la Gloria de la Luz los envuelva y eleve a todos y cada uno de ustedes a su Ascensión, antes de desencarnar o al cierre de esta encarnación. Muchas Gracias.

Del Libro La Voz del Yo Soy. Amada Astrea